El pasado domingo acudí a La Elipa para correr un cross de casi 6km en su -¿desconocido?- Pinar, que no es otra cosa que un amable y sinuoso espacio verde que desafía al también intrincado y enmarañado nudo de carreteras que lo cerca. La Asociación de Vecinos de la Elipa lleva muchos años haciendo de esta celebración deportiva una reivindicación para salvar ese trozito de bosque. Así, todos los corredores llegados a meta, reciben un pequeño pino listo para plantar. Y no me pueden caer mejor.
A pesar de llegar con tiempo, sólo calenté durante 5 minutos porque la organización resolvió a última hora la cola de personas que esperaban para inscribirse en tiempo récord.
La salida, cuesta abajo y con un giro a la izquierda a los 20m, desató la locura entre el enjambre de corredores, que se lanzaron para estar bien colocados a pesar de que no había grandes problemas de estrecheces en los caminos.
Durante los primeros 400m trato de buscar mi lugar, que adivino estará detrás del grupo de cabeza, que en esos momentos está integrado por 10 corredores…. Y menos mal que no me moví de ahí: antes de completar la primera vuelta se fueron cayendo del grupo 4 ingenuos kamikazes; ¡Sayonara!.
José Félix y Mariusz Turczyn se tutean en la parte delantera. Termino mi primera vuelta y después de alcanzar a un corredor pinchado, ya veo descolgados a tres corredores. Toca una larga zona de subida y veo como otro atleta se queda, literal, en la cuesta. Pocos metros más adelante se encuentra un corredor del Bikila que está sufriendo también mucho. Sin pensarlo y coincidiendo con su momento de crisis, les adelanto a pesar de no ir sobrado para remachar ese ataque y evitar que quieran seguirme.
El carril bici invade injustamente una parte del recorrido |
Más cuestas y más curvas cerradas. Sigo sin mirar hacia atrás y la carrera ahora exige sortear a los doblados, que no son pocos. Muchos leen en mi espalda “Vicálvaro” y me animan :) Mi padre me jalea y me recuerda que voy 4º. Giro el cuello y no hay nadie que suponga una amenaza. En todo momento veo al tercero, que va igual de descolgado que yo pero al que no voy a dar alcance.
Y así, y a pesar de descubrir a posteriori que un fortísimo Franrun venía como un cohete por detrás, terminando con algo de entereza llego a meta en 4º lugar, que a la postre sería también un 2º puesto sénior por detrás del atleta polaco. Algo para estar muy, muy contento.
Creo que venir a la Elipa ha sido un acierto porque me ha ayudado a reforzar las sensaciones de Llodio y el resultado me invita a pensar que vamos por el buen camino. Y esa certidumbre es justamente lo que necesito.
Mención especial para Pedro Sanz, compañero de fatigas que obtuvo trofeo en su categoría; para los también vicalvareños Raúl y Gerardo; y para Javi G.C. -o cómo correr 4 crosses en 14 días (¡!)-, que está progresando a base de bien (¡y de cross!). ¡Ah! y para Mariusz, que reclamó el error en las clasificaciones en beneficio de ambos.
¡Enhorabuena Mike! Me alegro de que tengas tan buenas sensaciones :-)
ResponderEliminarGracias Miguel por el recordatorio, pero la locura es aun mayor puesto que han sido 4 crosses en 8 dias. Así estoy hoy, con un dolor de cuerpo de alucinar y pensando si ir mañana a correr a Barajas merece la pena.
ResponderEliminarPor cierto enhorabuena por tu carrera, ahora te toca repetir el éxito del año pasado en el Poetas.
Un saludo
Javier Gómez Carroza
¿dónde vas a meter las copas? que ya no cabennn
ResponderEliminarenhorabuena runner !
ResponderEliminarEnhorabuena campeón, muy bonitas las fotos y también felicidades por las demás carreras. El domingo también estuvimos nosotros haciendo senderismo por Guadalajara, casi 20 Km., acabé cansada pero volví nueva.
ResponderEliminarMILA